Breve opinión sobre consumismo
El consumo es un derecho.
El derecho al derroche que es el privilegio de unos pocos, dice ser el derecho de todos.
Esta civilización lo cosifica todo: el tiempo, los recursos, no deja descanso a nada, ni a nadie.
En esta civilización se confunde la calidad con la cantidad: si eres gordo, está bien alimentado, como se propagandiza EEUU, criados en la cultura del abuso y la abundancia.
Esto hace pensar a la gente que eres cuánto vales, lo cual lleva a una gran depresión. Las empresas violan constantemente al tratar a sus empleados como si fueran robots controlados por control remoto, que ha degenerado en un trabajo que busca personas con gran adquisición de conocimientos pero sin ningún tipo de pedagogia.
Convierte en tiempo de ocio en tiempo de consumo. Consiguen exprimir hasta la última gota del dinero de todo todo gracias a la publicidad.
Cosifican las relaciones entre personas, que se han convertido en las relaciones entre cosas, objetos todos se comercializa y se privatiza. Los lugares de encuentro hasta hace poco se han convertido en máquinas de publicidad y exhibición de comercio cómo las cafeterías en los aeropuertos.
Los dueños de las marcas usan los recursos como si fueran descartables, como si la tierra fuese de usar y tirar: mercancías efímeras; como si hubiera otro mundo al que mudarnos. Este asunto no es un fallo en un defecto si un asunto urgente lo cual llevará a una sobreexplotación dentro de no mucho, mientras la gran mayoría consume poco y mal una gran minoría mucho y bien, lo cual no es un fallo ni un defecto sino un asunto urgente y de vital importancia lo cual llevará a una sobreexplotación no dentro de mucho.
Siempre se nos ha dicho salud, dinero y amor, pero hemos llegado un punto de la sociedad en el que el dinero puede comprar las dos cosas restantes, haciendo que nos convirtamos en una sociedad egoísta, que no ve más allá de su ombligo, que asume el consumismo más feroz de manera natural como una cualidad natural del ser humano.
Nuestro deber es hacer que esto cambie, intentar hacer que está sociedad, la cual piensa en el capital, como motivación vital de la existencia.
Tira millas.
El derecho al derroche que es el privilegio de unos pocos, dice ser el derecho de todos.
Esta civilización lo cosifica todo: el tiempo, los recursos, no deja descanso a nada, ni a nadie.
En esta civilización se confunde la calidad con la cantidad: si eres gordo, está bien alimentado, como se propagandiza EEUU, criados en la cultura del abuso y la abundancia.
Esto hace pensar a la gente que eres cuánto vales, lo cual lleva a una gran depresión. Las empresas violan constantemente al tratar a sus empleados como si fueran robots controlados por control remoto, que ha degenerado en un trabajo que busca personas con gran adquisición de conocimientos pero sin ningún tipo de pedagogia.
Convierte en tiempo de ocio en tiempo de consumo. Consiguen exprimir hasta la última gota del dinero de todo todo gracias a la publicidad.
Cosifican las relaciones entre personas, que se han convertido en las relaciones entre cosas, objetos todos se comercializa y se privatiza. Los lugares de encuentro hasta hace poco se han convertido en máquinas de publicidad y exhibición de comercio cómo las cafeterías en los aeropuertos.
Los dueños de las marcas usan los recursos como si fueran descartables, como si la tierra fuese de usar y tirar: mercancías efímeras; como si hubiera otro mundo al que mudarnos. Este asunto no es un fallo en un defecto si un asunto urgente lo cual llevará a una sobreexplotación dentro de no mucho, mientras la gran mayoría consume poco y mal una gran minoría mucho y bien, lo cual no es un fallo ni un defecto sino un asunto urgente y de vital importancia lo cual llevará a una sobreexplotación no dentro de mucho.
Siempre se nos ha dicho salud, dinero y amor, pero hemos llegado un punto de la sociedad en el que el dinero puede comprar las dos cosas restantes, haciendo que nos convirtamos en una sociedad egoísta, que no ve más allá de su ombligo, que asume el consumismo más feroz de manera natural como una cualidad natural del ser humano.
Nuestro deber es hacer que esto cambie, intentar hacer que está sociedad, la cual piensa en el capital, como motivación vital de la existencia.
Tira millas.
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