Qué terrible error

Me imagino que si no estáis al tanto de lo que ha pasado durante estos días previos en Cataluña es porque vivís en una cueva, así que daré por hecho que estamos todos más o menos al tanto de la situación que se ha vivido allí, que ha alcanzado su cúlmen con la actuación policial, no diré fascista, pero si con componentes autoritarios, que realmente deberían hacernos plantear si estamos en un estado de derecho o si es un país que como hemos visto utiliza la violencia de estado a su antojo, con agresiones que han estado a punto de costar la vida a muchísimas personas.

Hemos visto vídeos, tanto en las redes sociales como en los informativos (muchos menos y algunos manipulados, por otra parte, hecho que nos debería hacer dudar sobre la veracidad y el código deontológico de algunos periodistas) las agresiones fruto de una agresividad desmedida por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del estado, en su mayor medida Guardias Civiles y Anti-disturbios, que nos han puesto los pelos de punta, una actuación que desde mi punto de vista ha provocado que mucha gente que no tenía pensado ir a votar, se haya levantado con el animo dispuesto a dirigirse a las urnas. No han faltado agarrones de pelo a chicas y tirones de extremidades a muchas de éstas, tampoco han faltado golpes con la porra, diligencia de la casa de los Anti-disturbios, que por otro lado es especialidad de la casa de los mismos. Hemos podido observar a estos desgraciados golpear a personas mayores que, indiferentemente de que el Referéndum fuese legal o no, son ante todo seres humanos, y dejarlos tirados en la calle mientras estos y estas sangraban y eran atendidos por los vecinos de estas zonas urbanas. También hemos visto como una mujer era agredida sexualmente por un policía que cuando la estaba apartando, le agarraba del pecho, una actitud más propia de Donald Trump que de un miembro de los CCFFSS, un acto que no debería tener impunidad de ningún tipo y debería acarrear la suspensión de este sujeto, por violencia de género y acoso sexual. Mediante documentos audiovisuales se nos ha permitido ver cómo policías han cargado de manera inmisericorde contra civiles que lo único que hacían era mantener los brazos en alto, y si, he dicho los brazos en alto. Es lo que tiene la policía, si levantas los brazos, te agreden, pero oye, si levantas uno solo mientras entonas el Cara al Sol henchido de orgullo, ahí ya no se dan tanta prisa, como en las manifestaciones que tuvieron lugar el día anterior al Referéndum en la Plaza Mayor de Madrid ¡No sé, se me ocurre!

Todo este tipo de agresiones que he descrito someramente y por encima, han dado como resultado un total de más de 940 heridos y heridas, unas cifras con las que nuestro cobarde e incompetente presidente se ha sentido orgulloso en anunciar como hizo en la rueda de prensa, que la actuación del Gobierno había sido proporcional y un ejemplo para el mundo, en un alarde de chulería asqueroso, sabiendo la de víctimas que había dejado a sus espaldas ese mismo día. Todos deberíamos independizarnos, pero no de España, sino de éste imbécil, que se ha escondido de manera cobarde detrás de policías y jueces, debido a una incompetencia política que no le ha permitido poder solventar esta situación de una manera resolutiva y pacífica. Lo que ha hecho el Gobierno a mi, personalmente, me huele a venganza, sinceramente, porque si ya un juez había dictaminado que el Referéndum era ilegal y no vinculante ¿por qué ese afán por aplacar a la gente que buscaba expresarse, aunque fuera sin consecuencias legales? Desde mi punto de vista, lo único que ha conseguido Mariano Rajoy con su conducta y sus actos, es que Cataluña se vaya de verdad.

Ya no se trata de ser independentista o no serlo, o estar de acuerdo con cómo se votó o no, ya que yo por ejemplo, ni soy independentista, ni me gustó la forma en que se votó, sin garantías democráticas y de manera poco seria. Se trata de respetar el principio de autodeterminación de los pueblos, y la defensa de derechos fundamentales de la ciudadanía, unos derechos que como hemos podido ver, cuando al Gobierno del PP le parece, se pasa por el forro de los cojones. Una República Federal hubiese sido una buena solución, pero repito, gracias a Rajoy, Cataluña ya no es España en el corazón de los catalanes, aunque legal y jurídicamente sea así. Qué error, qué inmenso error.

Adjunto algunas de las imágenes de la vergüenza aquí junto a un vídeo que muestra la brutalidad con la que la policía cargó contra civiles desarmados.

Tira millas.


https://youtu.be/kyTphk8ymc4




















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