Se hace saber

Rajoy va a declarar en un juicio como testigo, por los numerosos casos de corrupción de su partido, un partido que es el que más casos tiene abiertos por corrupción, de Europa. Va a ser gracioso ver a una persona que dificultosamente puede articular oraciones subordinadas, declarando ante jueces. A ver si le salvan los vecinos o el alcalde, o quien sea, por que la que se le viene encima es buena, y no auguro un gran final a una persona que miente más que habla, y que cada vez que abre la boca, se concatenan una serie de factores que hace que las estrellas, qué digo las estrellas, los multiversos paralelos se alinéen, para poder prestar atención a este genio de la oratoria, una suerte de Fidel Castro español en lo que a elocuencia se refiere, aunque por duración ese papelón lo desempeñe Pablo Iglesias.

Aunque siendo ya sinceros, yo temo por el pobre Mariano, me da lástima que vaya a declarar a la sala del juzgado, y al no saber medir sus palabras, le de un ataque de sinceridad espontánea por los nervios causados de que por primera vez sus palabras tengan repercusión real, y diga toda la verdad sobre el partido podrido que preside con mano de hierro. Hierro fundido, pero hierro al fin y al cabo. Por todos es sabido que la incontinencia verbal de este nuestro presidente del gobierno le puede meter en un serio problema. Yo me imagino al juez que esté investigando la causa, escuchando frases como "Nuestra financiación es muy legal, y mucho legal" o "Es el partido el que elige al juez, y es el juez el que quiere que sea el partido el juez". No entiendo como este sujeto no ha recibido un Nobel de literatura, o en su defecto un premio Principe de Asturias a la literatura. Mariano, hay un sillón en la RAE con tu nombre, y si Pérez-Reverte tiene uno, quien soy yo para decir que tu no te lo mereces, campeón. Pero de esos temas ocupate mejor cuando ya hayas declarado por la corrupción de tu partido apestado por el mangoneo y el pitufeo.

Como le dijiste a tu buen amigo Luís, "Sé fuerte Mariano, se fuerte".